Los virus son pequeños programas que pueden hacer mucho daño a tus dispositivos. Al igual que los virus comunes que causan enfermedades, se propagan de un ordenador a otro y pueden “infectar” archivos, programas y, a veces, sistemas operativos enteros. Pero, ¿cómo lo hacen exactamente y qué puedes hacer para protegerte? Veámoslo más de cerca en este artículo.

¿Cómo funcionan estas “pequeñas plagas“?

Los virus informáticos son muy listos. Se disfrazan de archivos o programas normales para que los usuarios los inicien accidentalmente. He aquí cómo funcionan exactamente:

Cuando abres un archivo o programa que contiene un virus, el mismo virus se activa inmediatamente. Comienza a realizar tareas programadas por su creador. Esto puede ser cualquier cosa, desde mostrar notificaciones en tu pantalla hasta borrar archivos importantes, robar datos e incluso tomar el control de tu ordenador.

Una de las principales “habilidades” de un virus es su capacidad para copiarse a sí mismo. Busca otros programas y archivos en el ordenador e inserta su código en ellos. De este modo, la próxima vez que ejecutes estos programas o archivos, el virus se reactivará y seguirá propagándose. También pueden utilizar tu ordenador para atacar otros sistemas. Por ejemplo, envíate automáticamente por correo electrónico a tus amigos o colegas, disfrazado de correo normal.

Sin duda, mucha gente sabe que algunos virus están diseñados para robar información. Tienen la capacidad de registrar qué teclas pulsas en el teclado, recopilando así tus contraseñas, números de tarjetas de crédito y otros datos personales.

Estos mecanismos permiten que los virus se propaguen de forma eficaz e invisible, causando daños a los usuarios y a sistemas enteros. Por tanto, es muy importante que tengas cuidado con lo que descargas y abres en tu ordenador.

Ahora, hablemos de la parte más importante de este artículo, es decir, ¿cómo protegerse de estas plagas?

Para proteger tu ordenador de los virus, debes utilizar algunos métodos sencillos:

En primer lugar, instala un programa antivirus. Este es el paso más importante. El antivirus ayuda a detectar y eliminar virus en tu dispositivo. Incluso puede bloquear los virus antes de que causen daños.

Actualiza regularmente tu antivirus y otros programas. Los fabricantes de software lanzan constantemente actualizaciones para ayudar a proteger contra nuevos virus. Al instalarlos, aumentas la seguridad de tu sistema.

Ten cuidado con los correos electrónicos y las descargas. No abras correos electrónicos ni archivos adjuntos de fuentes desconocidas o sospechosas. Además, evita descargar aplicaciones y archivos de sitios web poco fiables.

Utiliza un cortafuegos (firewall). Un cortafuegos te ayuda a controlar qué datos entran y salen de tu ordenador a través de Internet. Puede bloquear intentos de acceso potencialmente dañinos.

Crea copias de seguridad. Hacer copias de seguridad periódicas de los archivos importantes te ayudará a recuperar rápidamente la información si un virus daña tus datos.

Utiliza cuentas con derechos limitados. Intenta no utilizar la cuenta de administrador para el trabajo diario. Las cuentas con derechos limitados tienen menos oportunidades de ejecutar programas maliciosos.

Si sigues estos sencillos pasos, reducirás en gran medida el riesgo de infección y ayudarás a mantener tus datos a salvo.

¿Cómo apareció el primer virus informático del mundo?

El primer virus informático del mundo que obtuvo un reconocimiento generalizado se llamaba Creeper. Creado en 1971 por el programador Robert Thomas, que trabajaba para BBN Technologies. “Creeper” era un software experimental que se creó para explorar las posibilidades de las redes. El virus viajaba por la red ARPANET, precursora de Internet, y mostraba un mensaje: “¡Soy la enredadera, atrápame si puedes!” (si se traduce al español, significaba “¡Soy la Enredadera, atrápame si puedes!”).

El cripper no se creó con la intención de causar ningún daño, simplemente demostró la capacidad de mover el programa por la red de forma independiente. En respuesta a Creeper, se creó otro código de software llamado Reaper, y éste, a su vez, buscó a Creeper en la red y lo eliminó, convirtiéndose así en el primer antivirus. Este acontecimiento allanó el camino para la evolución posterior de los virus informáticos y el desarrollo del software antivirus.

Todas estas pequeñas plagas forman parte del mundo digital, que está lleno de cosas interesantes, y aquí tienes algunos datos interesantes sobre ellas:

• Ya hemos mencionado anteriormente el primer virus informático, pero si hablamos del primer virus que infectó ordenadores personales, se creó en 1982. Se llamaba Elk Cloner y se distribuía mediante disquetes en ordenadores Apple II. Este virus mostraba un breve mensaje poético cada 50 veces que el sistema arrancaba desde un disco infectado.
• Algunos virus no se crean para hacer daño, sino como una forma de arte digital o activismo. Una de ellas es Bliss, escrita para el sistema operativo Linux. Nunca se ha lanzado sin el consentimiento explícito del usuario, ya que su autor quería demostrar que los usuarios deberían tener más cuidado con lo que instalan.
• El virus más caro. Los daños causados por el virus MyDoom se estiman en unos 38.000 millones de dólares. Se propagó a través del correo electrónico en 2004 y se considera uno de los virus de propagación más rápida de todos los tiempos.
• Un virus que “curaba” ordenadores. Welchia o Nachi apareció en 2003 para detectar y eliminar automáticamente el virus Blaster de los sistemas infectados. También descargó actualizaciones de Microsoft para cerrar la vulnerabilidad que Blaster estaba explotando. Sin embargo, Welchia también supuso una carga importante para los recursos de la red.
• No sólo los ordenadores pueden infectarse con virus. Los teléfonos móviles, los smartwatches e incluso los televisores inteligentes pueden ser víctimas de ataques de virus. Esto es posible gracias a las diferentes conexiones de red y sistemas operativos que utilizan estos dispositivos.

Teniendo en cuenta todo lo que hemos aprendido sobre los virus informáticos, está claro que el uso activo de programas antivirus, la manipulación cuidadosa de archivos desconocidos de Internet y todos los demás métodos son fundamentales para proteger nuestros datos y dispositivos. No olvidemos que la tecnología evoluciona constantemente, y los virus evolucionan con ella. Cuida de ti y de tus datos. Estar informado significa estar protegido.