En el mundo de las tecnologías de Internet, las etapas de desarrollo suelen indicar cambios clave en la forma en que nos comunicamos, interactuamos y accedemos a la información. Desde la sencilla interfaz basada en texto de la Web 1.0, pasando por las aplicaciones web dinámicas de la Web 2.0, hasta la web semántica y conectada de la Web 3.0, asistimos a una rápida evolución. Pero, ¿cuál será la siguiente etapa, la Web 4.0, o como a veces se la denomina “Neuronet”? He aquí las etapas previstas de su desarrollo. En primer lugar, tratemos de sumergirnos en la primera etapa, que va de 2015 a 2020.
Un vistazo a la primera fase de desarrollo (2015-2020)
Fundamentos conceptuales:
Antes de hablar de tecnologías y cambios concretos, es importante comprender la idea básica de la Web 4.0. Se presentó como una web “inteligente”, en la que las máquinas pueden “entender” e “intuir” las necesidades del usuario, ofreciéndole información o servicios antes incluso de que los solicite.
Conexión y comprensión:
Una de las características clave de este periodo es el desarrollo de sistemas capaces de interpretar y analizar datos en tiempo real, adaptándose a las necesidades del usuario. Esto significa que los sitios web y las aplicaciones intentan anticiparse a sus necesidades basándose en su historial de navegación, sus comentarios y otras fuentes de datos.
Integración con la realidad:
Este periodo también fue testigo del rápido desarrollo de las tecnologías de realidad aumentada (RA) y realidad virtual (RV). Estas tecnologías se están utilizando no sólo en juegos y entretenimiento, sino también en ámbitos como la educación, la medicina y la empresa. Internet es cada vez más “vivo” y la interacción con él más inmersiva.
Adopción temprana de la inteligencia artificial:
Por primera vez, la Web 4.0 introduce la inteligencia artificial no sólo como concepto o herramienta de análisis de datos, sino también como participante activo en la interacción con el usuario. Los primeros asistentes personales, como Siri, Alexa o Google Assistant, empiezan a aparecer e integrarse en la vida cotidiana de las personas.
Seguridad y privacidad:
A medida que la web se vuelve más inteligente y adaptable, la cuestión de la seguridad y la privacidad de los datos adquiere cada vez más relevancia. Por lo tanto, este periodo también fue testigo de la aplicación activa de nuevos mecanismos de protección y regulación de los derechos digitales.
La primera etapa del desarrollo de la Web 4.0 fue muy importante, porque fue entonces cuando se sentaron las bases para el posterior desarrollo de la Internet “inteligente”. Señala una tendencia hacia una Internet más personal, intuitiva y conectada que seguirá adaptándose y evolucionando en respuesta a las necesidades de los usuarios.
Una mirada a la segunda fase de desarrollo (2020-2030)
Internet, tal como la conocemos, sigue transformándose. Después de que la primera fase de la Web 4.0 nos introdujera en el concepto de web inteligente, la próxima década, que comenzó en 2020, nos traerá aún más innovaciones. Veamos en profundidad las principales tendencias de la segunda fase de desarrollo.
Descentralización:
En 2020-2030, tecnologías descentralizadas como blockchain se convertirán en dominantes en el ámbito de Internet. Esto permitirá la creación de aplicaciones descentralizadas (DApps) y organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs). Estas innovaciones darán a los usuarios más control sobre sus datos y activos digitales.
Asistentes personales de IA:
Si en la primera fase comenzó el desarrollo de los asistentes personales, en la segunda se convertirán en parte integrante de nuestras vidas. Mejorarán, serán más adaptables, capaces de anticiparse a las necesidades del usuario e incluso de imitar las emociones humanas.
Web semántica y búsqueda contextual:
Los motores de búsqueda pasarán de las palabras clave a comprender la semántica y el contexto de las consultas. Esto significa que los resultados de las búsquedas serán más pertinentes, teniendo en cuenta el contexto individual de cada usuario.
El espacio virtual global:
Con el crecimiento de las tecnologías de RV y RA, se creará un nuevo “universo” digital en el que los usuarios podrán interactuar no sólo con contenidos digitales, sino también con otros usuarios en tiempo real. Estos espacios se convertirán en lugar de trabajo, estudio, ocio y socialización.
Ética y regulación de la IA:
A medida que aumenten las capacidades de la inteligencia artificial, serán necesarias nuevas normas y reglamentos éticos. La privacidad, la seguridad y los derechos de los datos se están convirtiendo en el centro del debate sobre este tema.
La segunda fase del desarrollo de la Web 4.0, que ya ha comenzado en 2020, traerá cambios radicales en la forma en que percibimos e interactuamos con Internet. Desde la descentralización hasta las nuevas formas de realidad virtual, asistimos a la transformación de la web en un espacio más inteligente, personal y envolvente.